En el Salón del Cómic de A Coruña 2007


Del 13 al 19 de agosto se ha celebrado el Salón del Cómic de A Coruña. Una semana entera en la que un servidor no ha podido ir más que un día y ese día fue ayer, sábado 18.
Me levanté a una hora decente (comparada con la hora a la que suelo levantarme los sábados). En un principio iba a madrugar más, animado con la idea de que Tim Sale (uno de los invitados en esta edición del salón) asistiría a una sesión de firmas. Pero el señor Sale tuvo que marcharse el miércoles por razones personales, así que mi gozo en un pozo y decidí tomármelo con calma. Elaboré una amplia lista de los cómics que quería comprarme, me puse mi camiseta de Lobezno comprada en Nueva York y me fuí para A Coruña (un viaje de casi dos horas en coche). Una vez allí, lo primero que hice fue descubrir que el clima era mucho peor, nubes en el cielo que amenazaban lluvia y una temperatura algo inferior a lo que normalmente hay en Vigo. Luego fuí a sentarme junto a la familia Simpson, la cual esperaba amablemente a todo aquel visitante que quisiera inmortalizar dicho día en formato foto. Aunque, visto lo visto y contando con que la última vez que fuí a este salón fue hace dos años, supongo que el próximo año seguirán allí. Lo digo porque algunas figuras (Superman, Spiderman, Torpedo, Wonder Woman...) ya las había visto y la verdad es que no estaban en muy buen estado (es hora de actualizar a los personajes dispersados por la ciudad o al menos de ponerlos presentables para tan importantes citas anuales). Después de presentarme a los Simpson, me dediqué a hacer una primera aproximación a los stands. Decidí no empezar con cómics, si no con libros. Resultó que al lado estaba La Feria de Libros Antiguos, así que me acerqué para ver si había algo de interés. No encontré libro alguno que me apeteciese comprar, pero sí encontré algunos cómics antiguos y compré tres: dos de Los Vengadores y uno de Conan El Bárbaro. El de Conan y uno de Los Vengadores tienen fecha de 1978 y el otro del grupo superheroico no tiene fecha siquiera, pero debe ser anterior pues en su portada marca un precio de 40 pts. Los tres cómics son de Vértice (aún no comprendo como hay gente que los vende). Luego me dirigí ya hacía los stands de cómics. Como representación editorial estaban: Norma, Astiberri, Ariadna, Devir, BD Banda y La Cúpula (quizás me olvido alguna). El resto eran tiendas especializadas de cómics, tres de ellas de Vigo. ¡Ah! Hacer especial mención al stand de Fuck Comics, el famoso fanzine también de Vigo (espero que hayáis vendido mucho chicos!!). Enseguida me di cuenta de que la lista que había preparado para comprar (cuando vas a un salón te entran unas inexplicables ansias de comprar, debe ser por el ambientillo) iba a quedarse tal cual, no iba a tachar nada. Los stands estaban llenos de obras referentes a los autores que habían sido invitados al salón, y el resto eran cómics que resultaban atractivos sobre los mostradores, grandes obras y mucho merchandising, pero de novedades y de variedad no había mucho. Encontré, para mi sorpresa, la nueva entrega de Los Muertos Vivientes (digo sorpresa porque no lo tenía en la lista y no lo había visto anunciado en ningún sitio) y luego pensé en comprarme el nº1 de Bone, la exitosa creación de Jeff Smith (uno
de los invitados). Pero esa adquisición la dejé para más tarde, porque cuando me di cuenta eran casi las dos de la tarde y empezaba a tener hambre. Tenía tiempo de sobras, pues tanto las expos como los stands cerraban a las 14:00 horas y no abrían hasta las 18:00 horas (hay que ver como trabajan...). Después de comer, y dado que estaba al lado también, fuí a ver la exposición de El Señor de los Anillos. Está repartida en dos ciudades: A Coruña y Santiago de Compostela. La verdad es que me pareció esplendida, me encantó. Eché en falta a Golum, pero supongo que estará en Santiago, así que espero ir antes de finales de septiembre, que es cuando termina la exposición. Después de pasear por las tiendas (en las cuales mi mujer se sentía más cómoda que en el resto de nuestras visitas) y de merendar, volví a los stands donde me hice con el nº1 de Bone para tantear la serie y ver si los ochos números restantes podían valer la pena (debo decir que esa misma noche leí el cómic y me pareció bastante bueno, con lo que posiblemente me haga con toda la serie). Aún quedaba la última parada en las exposiciones, las cuales me gustaron. Me centré más en las de Tim Sale, Jeff Smith y el autor japonés Yoshihiro Tatsumi. Después de eso, me fuí en busca del coche y para casa. Lo mejor del salón: que no está dirigido hacía la comercialidad, más bien como medio de difusión para el cómic (que de eso se trata), los invitados (grandes autores), las exposiciones y las actividades. Lo peor: los horarios de las expos y se echa en falta algo de presupuesto, pero con las ilusiones que le ponen no importa demasiado. Anécdotas: que llovía un rato, luego salía el sol, luego volvía a llover... Que conocí en persona a David Buceta, un dibujante de Villagarcía con el que me comunico y trabajo por medio del e-mail. Y a dos niñas pijas que pararon a otra chica vestida con elementos otakus para hacerse una foto con ella tras preguntarle: "¿tú de qué vas vestida?" El año que viene vuelvo.




3 comentarios:

Anónimo dijo...

Con esta narración tan "descriptiva" no se si ir al próximo Salón o esperar que tu lo cuentes aquí. Bueno, aparte de esta indecisión vital, el Salón me ha paracido con los rasgos típicos de todos estos eventos, pero lo que me ha gustado es que no tuviese el caracter comercial tan marcado como es costumbre.
(Bueno, y acabo, porque después de leer la noticia, uno toma inercia y se "expande")

diecisietecosas dijo...

Nótese el siempre esencial detalle de 'NO SIN MI MERIENDA' (que ya deberias tener estampado en una camiseta...) del relato..no sea que interrumpamos el crecimiento!! jajaja!!
Qué detallada cronica!! (...y que sepas que no solo me lo pase bien en las tiendas...arff!!)

David Braña dijo...

Sí, merienda que casi se convierte en cena (¡que lentos los camareros por dios!!). Por otra parte, es normal que te lo pasases bien, ibas conmigo jurjurjur.